Proyecto Reintroducción de la tortuga meditarránea, un tándem en favor de la Biodiversidad
Dilluns 20 Març 2017Reintroducción de la tortuga mediterránea, uso de la custodia del territorio y colaboración empresarial
Un Tándem en favor de la Biodiversidad
El Club EMAS (Asociación de organizaciones registradas EMAS en Cataluña) y Asociación Trenca (entidad que trabaja en torno a la conservación y recuperación de la fauna y el patrimonio medioambiental) hemos llevado a cabo, como socios, el proyecto “Reintroducción de la tortuga mediterránea, uso de la custodia del territorio y colaboración empresarial”. Este proyecto ha tenido el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente.
Estas organizaciones, si bien somos las dos entidades privadas sin ánimo de lucro, provenimos de actividades, entornos y formas de trabajar diferentes, el Club EMAS es una asociación que representa a empresas y otras organizaciones que están registradas en EMAS (normativa voluntaria de la Unión Europea que reconoce a aquellas organizaciones que han implantado un Sistema de Gestión Medioambiental y han adquirido un compromiso de mejora continua, verificado mediante auditorías independientes) y la Asociación Trenca es una entidad del tercer sector ambiental que opera en el ámbito de la biodiversidad.
Trabajar conjuntamente en este proyecto ha supuesto dar respuesta a retos de diferentes tipos. Por un lado, acercar a las empresas a las actividades y proyectos de una entidad del tercer sector ambiental y, por otro, comenzar a tratar el impacto sobre la biodiversidad en empresas que, si bien disponen de un sistema de gestión y suelen tratar aquellos aspectos ambientales que están más directamente ligados a sus actividades (eficiencia energética, emisiones, residuos, etc.), tienen un menor conocimiento sobre los efectos de sus actividades, productos y servicios sobre la fauna, la flora y los ecosistemas. Además, para estas empresas era una gran oportunidad para conocer una dimensión de la biodiversidad fuera del ámbito de trabajo habitual y de su entorno más cercano y ha permitido explorar nuevas fórmulas de colaboración entre las empresas, la entidad y el proyecto.
A lo largo del mismo, sí que podemos decir hemos aprendido una gran lección: se puede colaborar entre empresas y entidades, conseguir resultados que beneficien a ambos y trabajar conjuntamente en pro de la biodiversidad y la sostenibilidad del planeta.
El objetivo del proyecto ha sido ayudar a recuperar una especie en peligro de extinción, la tortuga mediterránea (Testudo hermanni hermanni), mediante una actuación de dispersión con una técnica novedosa respecto a la utilizada hasta ahora: mantener los adultos libres “in situ” y que sean los jóvenes nacidos salvajes los que hagan la dispersión directamente, como alternativa a la liberación de ejemplares adultos nacidos en cautividad. Los resultados que se obtengan de esta experiencia podrán servir de base a otros proyectos de recuperación de poblaciones de reptiles en la península. Este quelonio es una de las especies de tortuga con una de las distribuciones geográficas más reducidas de Europa Occidental, y, en la Península Ibérica, Cataluña es el único territorio que cuenta con poblaciones naturales.
Uno de los trabajos principales ha sido la creación de un nuevo núcleo poblacional en la Vall Major de Bovera (Les Garrigues), como refuerzo al Proyecto de Reintroducción de la Tortuga Mediterránea en el Parque Natural de la Sierra de Montsant y como apoyo para la conservación de la especie en Cataluña.
Dadas las características del proyecto se ha contado también con la colaboración de entidades como la Generalitat de Catalunya, el Parque Natural de la Sierra de Montsant y el Centro de Recuperación de Anfibios y Reptiles de Cataluña (CRARC). El área en el que se han llevado a cabo las actuaciones son fincas en propiedad de la Asociación Trenca y fincas aledañas que se encuentran bajo un acuerdo de custodia para la gestión ambiental de las mismas.
Unas de las actividades importantes del proyecto, a parte de la ayuda a la reintroducción de esta especie de tortuga, también ha sido fomentar el voluntariado, las visitas al proyecto y las charlas sobre biodiversidad a los trabajadores de las empresas participantes.
Esta fórmula con participación “in situ” en el proyecto ha sido evaluada muy positivamente por las empresas y la entidad ya que ha permitido también el conocimiento mutuo encaminado a favorecer las actuaciones de colaboración. Además, visitar el proyecto ha permitido también fomentar otras colaboraciones en el ámbito de la economía circular y optimizar así recursos. De hecho, en este momento, las administraciones inciden mucho en la economía circular y este es un concepto más cercano a las empresas que ayuda a su implicación en este ámbito de trabajo. A raíz de todo ello, por ejemplo, empresas participantes han cedido materiales a la entidad Trenca para que esta los utilice en su actividad diaria y se pueda evitar costes en la compra de los mismos.
En general, la valoración por las dos partes es positiva, si bien reconocemos que el proyecto ha constituido un punto de partida y se ha abierto así una nueva vía de colaboración que ahora ambas partes debemos cultivar y en la que debemos seguir trabajando de forma conjunta para poder mejorar en futuras actuaciones. Somos conscientes que la implicación en un proyecto conjunto nos ha permitido conocernos, aprender a coordinar formas de trabajar y enfoques distintos y sumar esfuerzos para ir en una misma dirección. No obstante, la relación entre la Asociación Trenca, las empresas y el Club EMAS en general, creemos que para que no sea fruto de una sola actuación es necesario construir otros elementos y así poder realmente generar un vínculo estable entre empresas y territorio.
En este proyecto hemos aprendido algunos aspectos importantes a tener en cuenta que servirán para futuras actuaciones de implicación de empresas:
- La distancia. Es un factor a considerar en la programación de las actividades porque, por ejemplo, en esta actuación, la mayoría de las empresas que han participado estaban ubicadas en la zona este de la provincia de Barcelona, Tarragona y Girona y esto supuso un desplazamiento de por lo menos dos horas para la empresa más cercana. Este aspecto hay que considerar que puede incidir en el tiempo útil de las actividades y en los horarios ya que no es viable empezar una actividad de voluntariado antes de las 10:30 de la mañana, y, por otro lado, los horarios de las tortugas son los que son y, por ejemplo, éstas, a modo de ejemplo, se entierran en las horas más cálidas del día para salvaguardarse del calor lo que también reduce el cuadro horario para realizar actividades.
- La temporada. Dada la climatología del lugar y el comportamiento de las tortugas, las actividades se tienen que limitar a ciertos meses del año, teniendo que evitar los meses más calurosos del verano y los más fríos del invierno.
- El concepto restringido de “vínculo con el territorio”. Para varias de las empresas, hemos detectado que en el momento económico actual resulta prioritario colaborar en proyectos que se realicen o incidan sobre el área más cercana a la empresa (barrio, polígono, ayuntamiento o comarca). No obstante, el tema de la biodiversidad se debe, y lo hemos abordado, de manera amplia y holística, las empresas tienen aún una visión en la que predominan aquellas actuaciones que son más visibles ante las partes interesadas más cercanas territorialmente a la empresa (trabajadores, entidades o colectivos locales, ayuntamiento). Esta es una barrera que debemos tener en cuenta y trabajar para hacer coincidir la “demanda-oferta” de colaboración en biodiversidad teniendo en cuenta diversas entidades y proyectos en base a su ubicación.
Desde este punto de vista, creemos también que algunas de las colaboraciones que han surgido tienen un gran potencial de continuidad en el tiempo y pueden suponer una manera de construir una relación más duradera y de esta manera generar nuevas sinergias en el futuro. Además, es necesario buscar diversas fórmulas de colaboración que se puedan adaptar a los diferentes perfiles o necesidades de las empresas. Por este motivo consideramos que, concretamente, tres tipos de colaboraciones que se han dado seguramente intensificaran la relación de las empresas con el proyecto y en posibles futuras actuaciones:
- La compra del aceite “Salvatge” que se obtiene de los olivares ubicados en las mismas fincas en las que se ha realizado la reintroducción de la tortuga mediterránea (además una de las etiquetas del aceite lleva justamente la imagen de la tortuga). Esta colaboración puede suponer que las personas que han asistido a la visita o lo hagan en futuro, compren el aceite de año en año ya sea para consumo propio o como regalo de empresa. Ya existen colaboraciones en este campo de las empresas que han participado en el proyecto.
- La cesión de materiales constituye una forma de optimizar recursos y al mismo tiempo ver cómo materiales descartados por las empresas acaban teniendo una utilidad justamente en el área en la que se desarrolla el proyecto. Poder luego enviar fotografías del material cedido y utilizado puede ser una manera para que las empresas fomenten la reutilización y además tengan interés en volver a la zona para constatar el uso de los materiales y los avances obtenidos. Si al inicio del proyecto ha sido el Club EMAS quien ha invitado a las empresas a buscar y ceder algunos materiales en base a un listado preparado con la Asociación Trenca, luego han sido las propias empresas quienes proactivamente han contactado con el Club EMAS para preguntar si un determinado material podría servir o no.
- Con el objetivo de llegar a un público más amplio, mantener contactos con otras organizaciones paraguas que transmitan el objetivo de este tipo de proyectos. Por ejemplo, se han mantenido contactos con la Asociación Catalana de Profesionales del Turismo (ACPT) que ha visto con buenos ojos organizar una iniciativa para mayo del 2017 coincidiendo con el día de la Biodiversidad. Se trata de un “Menú Biodiversidad” en el que algunos restaurantes incluyan en sus platos los productos de las entidades del tercer sector que se generen en fincas bajo acuerdos de custodia y que, por lo tanto, además de ser ecológicos tengan el valor añadido de promover la Biodiversidad. Esta iniciativa implicará a más de una entidad, no solamente a la Asociación Trenca, para poder contar con una más amplia gama de productos y además promover sinergias y colaboraciones entre diferentes organizaciones que trabajan por la biodiversidad.
- Las aportaciones a través de herramientas como Bookdifferent (Plataforma online de gestión de viajes que permite ceder un porcentaje a entidades) para reservas de alojamiento por motivos de trabajo son posibles para aquellas empresas que no tengan un contrato de exclusividad con una agencia de viajes determinada. En aquellos casos en los que exista un contrato, también es posible invitar a la empresa a hacer difusión entre sus trabajadores para viajes personales. El verdadero impacto de esta actuación es el de poder llegar a varias personas y así conseguir una aportación global al proyecto que sea significativa. Posteriormente al proyecto y en ocasión del Año Internacional del Turismo Sostenible (2017), Club EMAS ha realizado ya una campaña de promoción enviando una ficha en su boletín y en otros medios para animar a los suscriptores a hacer pequeñas donaciones en el momento de realizar sus reservas. En este enlace se puede ver la noticia y descargar la ficha informativa: http://www.clubemas.cat/news/ca_ES/2017/02/28/0001/el-club-emas-amb-lany-internacional-del-turisme-sostenible-per-al-desenvolupament
Todo ello nos hace entender que el verdadero valor del proyecto ha sido el haber podido trabajar juntos y tener ahora un largo camino de colaboración con grandes perspectivas de futuro.
Una lección aprendida ha sido que los tiempos de las empresas y los tiempos de la biodiversidad no siempre coinciden. Hemos aprendido que quizás este tipo de proyectos requieren una duración más larga para poder gestionar posibles cambios de fechas de las actividades y también para poder dar tiempo a las empresas a iniciar internamente procesos que les permitan activar las colaboraciones con la entidad, como por ejemplo las posibles actividades de voluntariado u otro tipo de colaboraciones. No ha sido fácil organizar la visita y adaptarse a la temporada que era favorable para la liberación de las tortugas por ejemplo. También hemos detectado algunas barreras para entender la biodiversidad como una parte integral de la gestión ambiental de la empresa y esto es un proceso que requiere tiempo y también un cambio de cultura. Las empresas aún no han asumido del todo la importancia de la biodiversidad en el marco de su gestión ambiental o por lo menos no al mismo nivel de los demás aspectos ambientales. De hecho, las empresas controlan y trabajan de manera más extensa los aspectos relacionados con los consumos y emisiones (eficiencia energética, consumo de agua y otros recursos, emisiones de gases de efecto invernadero, generación de residuos, etc.) pero no los relacionan con los efectos sobre la biodiversidad y no están acostumbrados a evaluar las dependencias de la empresa respecto a los servicios de la biodiversidad.
El proyecto, y como gran resultado del mismo, ha puesto de manifiesto que colaborar y poder realizar una visita a un proyecto sobre biodiversidad puede contribuir a ampliar la visión y a cambiar este enfoque. Es necesario que paulatinamente las empresas también modifiquen sus procedimientos de evaluación de aspectos ambientales para que pongan de manifiesto la inclusión de este aspecto ambiental de forma sistemática. Para el 2017, aprovechando los recientes cambios en la norma ISO 14001:2015 y la futura publicación de los anexos modificados del Reglamento EMAS, el Club EMAS organizará una sesión de trabajo con las empresas y aprovechará la ocasión para proponer cómo incluir la biodiversidad en los procedimientos actuales y abrir así la puerta a trabajar este aspecto de manera similar a los demás aspectos ambientales. Por ahora, algunas de las empresas del grupo participante ven la colaboración en proyectos de biodiversidad más desde una perspectiva de Responsabilidad Social/filantropía más que como un elemento estratégico de su organización. Es necesario, por tanto, permitir a las empresas que conozcan los proyectos de las entidades y, de la mano de los expertos en biodiversidad, tengan la oportunidad de entenderla en toda su amplitud y complejidad. Por este motivo, des del Club EMAS seguiremos insistiendo en este tipo de actuaciones e intentaremos hacer coincidir empresas de diversos sectores y dimensiones, lo que creemos es muy importante ya que contribuye al intercambio de puntos de vista y también a un mayor nivel de interacción y de generación de opciones de colaboración.
Se necesita tiempo para generar una relación de colaboración y un vínculo de la empresa con el territorio que va más allá de la duración de un proyecto. Si bien, es razonable pensar que, si continúan generándose colaboraciones y proyectos como este a medio o largo plazo se pueda instaurar un vínculo estable y duradero de las empresas con el territorio.
Maria Passalacqua y Gregori Reyes
(Club EMAS)
Núria Esteve, Jesús Almarza y Damià Sánchez
(Asociación Trenca)
DESCARGAR ARTÍCULO EN PDF
Una lección aprendida ha sido que los tiempos de las empresas y los tiempos de la biodiversidad no siempre coinciden. Hemos aprendido que quizás este tipo de proyectos requieren una duración más larga para poder gestionar posibles cambios de fechas de las actividades y también para poder dar tiempo a las empresas a iniciar internamente procesos que les permitan activar las colaboraciones con la entidad, como por ejemplo las posibles actividades de voluntariado u otro tipo de colaboraciones. No ha sido fácil organizar la visita y adaptarse a la temporada que era favorable para la liberación de las tortugas por ejemplo. También hemos detectado algunas barreras para entender la biodiversidad como una parte integral de la gestión ambiental de la empresa y esto es un proceso que requiere tiempo y también un cambio de cultura. Las empresas aún no han asumido del todo la importancia de la biodiversidad en el marco de su gestión ambiental o por lo menos no al mismo nivel de los demás aspectos ambientales. De hecho, las empresas controlan y trabajan de manera más extensa los aspectos relacionados con los consumos y emisiones (eficiencia energética, consumo de agua y otros recursos, emisiones de gases de efecto invernadero, generación de residuos, etc.) pero no los relacionan con los efectos sobre la biodiversidad y no están acostumbrados a evaluar las dependencias de la empresa respecto a los servicios de la biodiversidad.
El proyecto, y como gran resultado del mismo, ha puesto de manifiesto que colaborar y poder realizar una visita a un proyecto sobre biodiversidad puede contribuir a ampliar la visión y a cambiar este enfoque. Es necesario que paulatinamente las empresas también modifiquen sus procedimientos de evaluación de aspectos ambientales para que pongan de manifiesto la inclusión de este aspecto ambiental de forma sistemática. Para el 2017, aprovechando los recientes cambios en la norma ISO 14001:2015 y la futura publicación de los anexos modificados del Reglamento EMAS, el Club EMAS organizará una sesión de trabajo con las empresas y aprovechará la ocasión para proponer cómo incluir la biodiversidad en los procedimientos actuales y abrir así la puerta a trabajar este aspecto de manera similar a los demás aspectos ambientales. Por ahora, algunas de las empresas del grupo participante ven la colaboración en proyectos de biodiversidad más desde una perspectiva de Responsabilidad Social/filantropía más que como un elemento estratégico de su organización. Es necesario, por tanto, permitir a las empresas que conozcan los proyectos de las entidades y, de la mano de los expertos en biodiversidad, tengan la oportunidad de entenderla en toda su amplitud y complejidad. Por este motivo, des del Club EMAS seguiremos insistiendo en este tipo de actuaciones e intentaremos hacer coincidir empresas de diversos sectores y dimensiones, lo que creemos es muy importante ya que contribuye al intercambio de puntos de vista y también a un mayor nivel de interacción y de generación de opciones de colaboración.
Se necesita tiempo para generar una relación de colaboración y un vínculo de la empresa con el territorio que va más allá de la duración de un proyecto. Si bien, es razonable pensar que, si continúan generándose colaboraciones y proyectos como este a medio o largo plazo se pueda instaurar un vínculo estable y duradero de las empresas con el territorio.
Maria Passalacqua y Gregori Reyes
(Club EMAS)
Núria Esteve, Jesús Almarza y Damià Sánchez
(Asociación Trenca)
DESCARGAR ARTÍCULO EN PDF